Ella ríe por nada,
llora por todo,
a menudo hace incluso las dos cosas a la vez.

Es un absoluto caos
perfectamente ordenado
y muy pocos conocen las reglas que la gobiernan.

A veces le traicionan los nervios
y se ahoga en su vaso de dudas
pero ella sola se rescata de ese mar.

Cuando se pierde pinta, escribe o duerme.
Ante todo baila siempre.

Echa de menos,
quiere de más
y si te abraza no te querrá soltar.